Patatas a la Riojana

Uno de los tantos platos sabrosos de la Gastronomía Riojana..alguno/as lo conoceis de sobras, pero hay que hacerle los honores.

Ingredientes para 6 personas:

2 kilos de patatas harinosas.
1-2 puerros.
1-2 tomate (o también triturado).
1 cebolla mediana. (Al llevar puerro se puede omitir, a mí me gusta así)
1 chorrito de aceite de oliva.
1-2 dientes de ajo.
1 hoja de laurel.
1 pastilla de caldo de carne.
2 o 3 pimientos. Los verdes como en la foto sirven, si son choriceros, mejor que mejor.
1/2 chorizo Riojano picante.
1 cucharita de café de pimentón dulce o picante, eso ya al gusto.
.Sal.

Empezamos. ánimo que es sencillísimo!

En una cazuela a fuego lento vertemos un chorrito de aceite de oliva y agregamos la cebolla, puerro y ajo, todo muy bien picadito. Del puerro aprovechamos tanto lo verde como lo blanco.

Cuando está pochadito todo ya podemos añadir 2 o 3 cucharadas del tomate triturado y tras unos minutos el pimentón. Otra opción es olvidarse del tomate triturado, podemos añadir después a las patatas directamente un tomate "rajado" para que vaya soltando el juguito y el resultado es similar.

Con el pimentón no hay que enredar porque se nos puede quemar, así que ya sabeis, lo justito.
Ahora ya podemos meter las patatas en la cazuela. Las hemos "cascado" en trozos hermosos y las cubrimos con agua.

Añadimos 1-2 hojitas de laurel, los pimientos limpios de pepitas etc, los trozos de chorizo y la pastilla de extarlux.

Le damos caña al fuego, esperamos a que empiece a hervir y en cuanto lo haga se deja a fuego lento  aproximadamente 3/4 hora. ( seguramente estarán un poco antes, dependiendo de la clase de patata y del agua).

Miéntras, vamos vigilando las patatas clavando un tenedor, eso nos dará idea de como van. Probamos su punto de sal y cuando ya están las dejamos reposar 5 minutos.

Si salen muy caldosas y queremos espesarlas un poco, podemos machacar patatas hasta que estén a nuestro gusto.

En el caso de haber usado los tomates y pimientos enteros, se pueden pasar por el chino o trituralos con la batidora. Alguna vez me ha pasado que no han dejado en el plato ni siquiera el laurel, os lo aseguro.

Que aproveche!